Génesis 12:3 "Bendeciré a quienes te bendigan y maldeciré a quienes te traten con desprecio. Todas las familias de la tierra serán bendecidas por medio de ti."
Dios escogió a Abraham para que fuese el comienzo del camino que Él utilizaría para nuestra completa redención. Dios pensó desde el momento de la caída la forma en que vendría a salvarnos y eligió a Abraham por su fe y su obediencia.
Abraham es el primer patriarca de la nación de Israel, de la cual saldría nuestro Salvador, Jesús.
En el primer capítulo de Mateo (el nuevo testamento) se escribe la genealogía de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abraham. Es a través de la genealogía descrita en este libro y en el de Lucas que nos podemos dar cuenta que Dios cumplió su promesa: Hizo de Abraham una gran nación y, a través de su descendencia, vino Jesús, el Hijo de Dios, para que por medio de su muerte y resurrección todos los seres humanos podamos disfrutar del regalo de la salvación.
De esta promesa podemos ver dos actitudes:
La actitud de Abraham: Génesis 22:18 "y mediante tu descendencia, todas las naciones de la tierra serán bendecidas. Todo eso, porque me has obedecido". La fe y la obediencia fueron características de Abraham. Dios lo eligió para salir de su hogar e ir a una tierra que no conocía, y lo hizo. Dios le dijo que iba a nacer de él una gran nación, a pesar de ser muy mayor y su esposa estéril, pero el creyó. ¿Cuántas veces nosotros ni creemos ni obedecemos? Por distracciones cotidianas vivimos unas vidas mediocres y sin sentido, viviendo el día a día como si la vida nos pesara. Dios quiere que creamos en lo que Él nos ha prometido, que vivamos según esas promesas con esperanza, amor y confianza, y que obedezcamos lo que Él nos manda a hacer como hijos suyos. Vivir vidas obedientes, preparados para servir en lo que haga falta para el reino de los cielos.
La actitud de Dios: Número 23:19 dice "Dios no es un hombre, por lo tanto, no miente. Él no es humano, por lo tanto, no cambia de parecer. ¿Acaso alguna vez habló sin actuar? ¿Alguna vez prometió sin cumplir?" Dios es fiel, cumple todas sus promesas, en el momento que a Él le parezca apropiado. Dios no tarda, Dios no se olvida de lo que dijo. Si Él ha prometido, el lo cumple y debemos vivir confiados, si Él nos ha prometido que tendremos bendiciones eternas, así será.
Confía en sus promesas y se obediente a sus mandatos. Todo lo que Él te ha dicho lo cumplirá sólo tienes que esperar y obedecer.
-Ánimo.