¡Hola Yalovs! una nueva semana ha comenzado ¿Con energía? Para ser sincera, yo no tengo mucha, pero como dicen en mi familia ¡Fuerza de voluntad! Trabajemos juntos para que sea una semana entretenida y ¿Por qué no, una semana diferente? Hagamos algo que hace mucho no hacemos, inventemos formas nuevas de divertirnos. Volvamos a ser esos niños y niñas que se inventaban un juego sólo con una caja, un palo o cualquier cosa que llegara a nuestras manos.
Pero primero, quiero comentarles en el día de hoy algo que hace mucho no sale de mi cabeza y quizá, por un momento, tengamos que ponernos serios.
Todo comenzó desde que hice un vídeo con unos amigos para animar a las personas en tiempos de crisis al empezar el confinamiento, obviamente fue con las mejores intenciones del mundo. Al final teníamos que decir una frase "Todo va a estar bien" y me encantó, porque mi corazón confía en que pasará todo lo que tenga que pasar y será bajo la soberanía del Dios al que creo. Pero, una pregunta venía a mi mente vez tras vez ¿Cómo a alguien que ha perdido un ser querido le puedo decir que "Todo va a estar bien? ¿Cómo alguien que está teniendo problemas económicos y no tiene para comer le puedo decir que "Todo va a estar bien"? Realmente, me empezó a dar miedo decir que "Todo va a estar bien" pero hay algo que no me da miedo decir:
"A ti que tienes miedo, a ti que has perdido a alguien cercano, a ti que quizá hoy no tienes con qué alimentarte ni alimentar a los tuyos; yo hoy me pongo en tu posición y la entiendo porque también la he pasado. He tenido miedo y he perdido a seres queridos y también he pasado por necesidad económica, pero en cada uno de esos momentos obtuve lo que necesité. Cuando tenía miedo Dios me dio paz, cuando me embargaba la tristeza Dios me dio consuelo, cuando sentía que el mundo se me venía encima Dios me dio seguridad y me sostuvo, y la lista puede continuar. A este Dios es a quien yo te quiero presentar. Sea cual sea la situación por la que estés pasando Dios quiere caminar contigo, Él no es ajeno a tu sufrimiento, sino que a través del sufrimiento podemos reconocer su poder. Con Dios quizá las cosas no cambien o tarden en cambiar, pero lo que seguro cambiará será tu corazón y tu perspectiva del problema. Dios dijo que Él conocía todas nuestras necesidades y que Él puede suplirlas, pero necesitamos acercarnos a Dios en humildad. ¿Cómo acercarte a Dios? Él dejó sólo un camino: Jesús. Sólo creyendo en Él como el único intermediario entre Dios y los seres humanos e identificándonos con lo que hizo en la cruz por nosotros, al pagar el precio de nuestro pecado, podemos obtener línea directa con Dios. Cuando nos rendimos ante Dios y nos arrepentimos Dios oye nuestro clamor, nos perdona y nos sana.”
Cuando acabe todo esto quizá no todo vaya bien, pero debemos estar seguros de que el amor y la fidelidad de Dios permanecerán para siempre. Ya no estamos solos, nuestros problemas ya no son sólo nuestros problemas sino también los de Dios y nuestros miedos ya no tienen poder porque más fuerte es el que está con nosotros. Si deseas más información sobre esto, no dudes escribírmelo en los comentarios.
Y para despedirme, quiero animarte, como buen comienzo de semana, a hacer una lista de proyectos/metas/propuestas para lo largo de estos 7 días y, si lo deseas, escríbemelas en los comentarios.